11/10/2022

Encuentro Plurinacional de Mujeres: San Luis recibió 130 mil personas

Después de dos años, la edición 35º de este evento fue un éxito pero trajo polémicas.

Pasaron dos años de pandemia en los que el Encuentro Plurinacional de Mujeres no se llevaba a cabo, o por lo menos no con tal masividad como la de este año: 130 mil personas se movilizaron a San Luis para el evento entre el 8 y el 10 de octubre, listas para tomar la palabra, debatir, hacer catarsis, formarse, llegar a conclusiones y más. Como siempre, se embanderan de las luchas de cada territorio y algunas de las consignas principales fueron la búsqueda de Guadalupe Lucero, la niña que se encuentra desaparecida en la provincia y que mantiene al país en vela hace más de un año; y el pedido de justicia por Florencia Magalí Morales y todas las mujeres víctimas de femicidio.

Estos dias de unión llegaron con 105 talleres sobre “Identidades y sexualidades”, “Relaciones sexo-afectivas, familias diversas y crianzas”, “Derechos Humanos y acceso a la justicia”, “Coyuntura geopolítica y económica”, “Trata de personas y sistema prostituyente” y “Feminismos, transfeminismos, mujeres y diversidades indígenas y sus luchas en el ámbito de la salud y el autocuidado”, entre otras temáticas.

Pero también trajo polémicas ya que es el primer año que se presenta como “Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas, Trans, Travestis, Intersexuales, Bisexuales y No Binaries”, en vez de simplemente “Encuentro de Mujeres” como sucedía desde 1986. “Cambiar el nombre a nuestro querido encuentro no es un capricho de esta comisión. Es escuchar, empatizar, visibilizar, darle existencia a tantas y tantes cumpañeres que no ´encajan´ en la categoría de MUJER y tampoco se sienten nombrades al hablar de NACIÓN”, se lee en el sitio web de la organización.

Pero, ante esta iniciativa, surgieron cuestiones como la invisibilización, una vez más, de la mujer. Críticas como que las personas que no se identifiquen como mujer, formen su propio encuentro que llegaron desde @un.dia.sin.nosotras. Por otro lado, desde organizaciones de izquierda como Pan y Rosas, se resaltó el gasto del Estado en este espacio: 350 millones de pesos y aseguran que de esta manera “se pierde la autonomía del evento” y se convierte en un espacio para, una vez más, hacer propaganda con nuestro dolor. Además, desde Izquierdiario juzgaron ciertas irregularidades en la organización.

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