11/01/2023

La justicia sostiene que se suicidó, pero la familia cree que fue asesinado

Un joven wichí fue hallado con dos tiros en la espalda y nuca, y los genitales mutilados.

El 3 de enero, Mateo Iván Donato, un joven wichí de 19 años de la comunidad Eben Ezer del pueblo General Pizarro, fue hallado muerto. La causa fue caratulada como suicidio; pero la familia señala que hay indicios de que fue asesinado: dos tiros, uno en la nuca y otro en el pecho, además de tener los genitales mutilados y marcas de golpes.

El cuerpo fue hallado por un transeunte que relató haber visto “un bulto negro” cuando se dirigia a la entrada del pueblo. Advirtió que se trataba de un cuerpo con la cara ensangrentada y dio aviso a las autoridades. Así, se hizo presente la policía en el lugar junto a la justicia. La investigación se encuentra a cargo de la fiscal María Celeste García Pisacic, junto al auxiliar Yoni Zigarán.

Vecinos comentaron que los efectivos levantaron el cuerpo y realizaron pericias en la noche; pero al día siguiente no se dejó custodia policial en la escena. Según informa DNI Salta, Antolín Donato, el padre del joven, dijo que personal policial fue alrededor de las 21 a preguntar si faltaba alguien en su comunidad, les respondió que faltaba su hijo. "Me empezaron a pedir documento (...)", contó e indicó que cuando se los entregó, los policías no le informaron que su hijo había fallecido. Él pensó: "¿Para qué me piden el documento del chango? Debe estar preso".

Además de no informarle sobre el fallecimiento, no lo llevaron para reconocer el cuerpo, ni le dieron participación alguna en las primeras horas del hallazgo. La policía acudió a los bomberos voluntarios de Apolinario Saravia para que fueran testigos del levantamiento del cuerpo bajo el argumento de que la familia demoraba en llegar, cuando ni siquiera estaban al tanto y recién a la mañana siguiente les informaron que podían “pasar a retirar el cuerpo”.

En la policía entregaron el acta de defunción, la cual solo indica que el joven murió por hemoneumotórax agudo (acumulación de sangre entre la pared torácica y el pulmón) por herida de arma de fuego, al padre y a la madre. Luego los familiares fueron a encontrarse con la auxiliar fiscal, quien les informó que encontraron en la escena un arma calibre 22. La funcionaria indicó en ese momento que investigarán quién es el propietario del arma, y también dio a conocer que el joven tenía una carta en un bolsillo en la que haría mención a cuestiones sentimentales.

La familia espera los resultados de la autopsia para radicar una denuncia por sus sospechas de homicidio. "El padre se arrastraba pidiendo justicia, no había nadie que lo apoye, no había concejales, ni el intendente. La gente de la comunidad, la mayoría no sabe leer y escribir. No saben qué le pasó (al joven). Quieren el esclarecimiento", manifestó Fernández, una maestra bilingüe que colaboró.