29/05/2023

Uganda contra la comunidad LGBTIQ+

El presidente firmo una ley que incluye pena de muerte, criminalización de la homosexualidad, terapias de conversión y más atrocidades.

Aunque de este lado del mundo criminalizar la homosexualidad no suena a algo del siglo pasado, hay paises que continuan con estas politicas de odio y, dolorosamente, no son pocos. Recientemente, el presidente de Uganda, Yoweri Museveni, firmó una de las leyes contra el colectivo LGBTIQ+ más duras del mundo.

Este proyecto de ley incluye atrocidades como pena de muerte por “homosexualidad agravada”. En esta categoria se incluye, como si fuera una cuestión reservada para el colectivo, relaciones sexuales con menores de edad, relaciones sexuales siendo seropositivo (se aplica sobre todo, aunque no exclusivamente, a la persona que presenta anticuerpos del sida) e incesto. Lo más contradictorio de esto, es que penaliza también cualquier tipo de educación sexual sobre el tema.

Además, ilegaliza no denunciar a la policía a los que denomina autores de homosexualidad agravada. Exige la "rehabilitación" —una terapia de conversión ampliamente desacreditada— de los “delincuentes homosexuales”.

Ahora, el proyecto debe ser aprobado por el parlamento donde la presidenta del órgano apoya y alienta su aprobación diciendo que el parlamento "respondió a los gritos de nuestro pueblo". A esto, agregó: "Agradezco a su excelencia, el presidente, su firme actuación en interés de Uganda. Con mucha humildad, doy las gracias a mis colegas diputados por haber resistido toda la presión de los matones y los teóricos de la conspiración catastrofista en interés del país".

Ante tales discursos de odio, activistas de la comunidad se han manifestado. Henry Mukiibi declaró a CNN que teme que la gente se tome la ley por su mano: "Creo que esto es tan, tan horrible. No esperábamos esto; pensábamos que se lo desaconsejarían. Nos van a torturar. Ahora tengo miedo de lo que pueda pasar. La gente ha estado esperando a que se firme el proyecto de ley y entonces trabajarán con nosotros. Vamos a morir".

Nicholas Opiyo, un destacado abogado de derechos humanos, declaró a CNN que "Esto no sorprende a nadie que siga de cerca los acontecimientos, pero sigue siendo profundamente preocupante que el país discrimine con saña a sus minorías sexuales. Las líneas de batalla están trazadas y la próxima etapa de la impugnación será en un tribunal de justicia". A esto, añadió: "La sociedad civil de Uganda, junto con la comunidad LGBTQI, está preparada para llevar este asunto a los tribunales e impugnar la ley. Porque esta ley es profundamente discriminatoria y represiva y no cumple ninguna norma internacional de derechos humanos ni local".

Así, llamó a los socios para el desarrollo de Uganda a pedir cuentas al gobierno ugandés.