12/01/2025 10:07

Detuvieron al “Lobo alfa” de Balvanera: meses de denuncias y un violento desenlace

José María Conde, apodado el "Lobo alfa" por los vecinos de su edificio en avenida Corrientes al 2700, fue detenido este viernes tras un violento incidente en la comisaría vecinal 3A de Balvanera. El hombre, conocido por su comportamiento agresivo y las reiteradas denuncias en su contra, golpeó al jefe de servicio policial luego de que le retiraran a su perro por maltrato.

Un conflicto que escaló al límite

Conde ingresó a la comisaría "visiblemente ofuscado", según testigos, tras la intervención de una ONG que rescató a su mascota ese mismo día. Vestido con una chomba de River, pantalones deportivos y crocs con medias, arremetió sin previo aviso contra el jefe policial, lo que derivó en su inmediata detención por "resistencia a la autoridad y lesiones".

Horas antes, el hombre había sido trasladado al hospital Fernández tras descompensarse cuando le quitaron al perro. Más tarde, ya estabilizado, regresó a su departamento profiriendo amenazas como “voy a incendiar el edificio”, lo que alarmó aún más a los vecinos.

Denuncias de larga data

Desde noviembre de 2024, Conde acumulaba denuncias por amenazas, hostigamiento, maltrato animal y ensuciar bienes comunes del edificio. Videos de cámaras de seguridad captaron momentos en que pateaba a su perro antes de entrar al ascensor, lo que motivó la intervención de la ONG.

Agustín, un vecino, afirmó que Conde “quiere controlar el consorcio” y que sus actitudes intimidatorias eran frecuentes. Otro habitante del edificio, Alberto, describió cómo el comportamiento de Conde se deterioró tras una internación voluntaria y el abandono de su pareja. “Él está enfermo y necesita ayuda. Pero lo que hace no puede justificarse”, sostuvo.

El "Lobo alfa" de Balvanera

El apodo con el que se lo conoce surgió de un mensaje intimidatorio que Conde dirigió al edificio: “Acá hay lugar para un solo lobo alfa”. Si bien algunos vecinos inicialmente lo veían como alguien de carácter fuerte, con el tiempo sus actitudes se tornaron agresivas e impredecibles.

A pesar de defenderse públicamente y negar las acusaciones, el golpe al jefe policial y los antecedentes acumulados llevaron a que fuera detenido. Ahora, las autoridades deberán definir su situación judicial, mientras los vecinos esperan poder volver a vivir en paz.

/Tiempo Argentino