14/02/2023

Falsamente acusados de abusar y matar a su beba de 21 días

Los padres denunciados por sospechas de los médicos del hospital de La Matanza no mentían.

Hace una semana, dos jóvenes padres de La Matanza fueron detenidos en el hospital Balestrini luego de que medicos encontraran posibles signos de abuso sexual en su beba de 21 dias, Alison Barrientos, quien habría ingresado a la institución con muerte cerebral.

Al llevarlos, no les dijeron que sucedía. Recién en la celda se enteraron de la muerte de la beba que ellos pensaban solo se había ahogado con leche. Muchas fueron las violaciones de derechos humanos que sufrieron, empezando porque la policía los maltrató y hasta torturó, según asegura el padre. También fueron brutalmente golpeados por otros detenidos.

Mientras se realizaban las indagaciones necesarias para imputar en caso de que se confirmaran las sospechas, el medio de Mauro Szeta, Via Szeta, se ocupó de difundir irresponsablemente el nombre de estas personas insinuando que la acusación ya era formal. Este error del periodista provocó que incluso trascendieran los rostros de Gabriel y Layla; quienes sufrieron lo peor durante su detención.

Ahora, con las autopsias que comprueban que la beba no fue abusada sino que efectivamente habría fallecido al ahogarse, sus padres están libres después de sufrir la peor semana de sus vidas. “Sufrimos maltrato físico, verbal y mental. En todos los sentidos. Nos golpearon, entrando en la comisaría, estando con los reclusos. Me decían varias barbaridades de mí y de mi hija y no podía hacer nada porque era acusado”, dijo Gabriel a los medios.

En el hospital, el trabajo fue el correcto: denunciar ante la sospecha. Estamos en un momento en el que todos y todas estamos movilizados por el caso de Lucio Dupuy y fuimos bombardeados con el maltrato infantil, quedando susceptibles. Pero estas susceptibilidades no pueden afectar a los procesos judiciales. No se justifica el atropello de unos derechos con el atropello de otros.