Economía
25/09/2025 22:21
Finanzas claras
La economista y cantante Azul Giménez pasó por Mesa Chica y habló sobre la importancia de ordenar las cuentas personales, planificar el futuro y entender que cualquiera puede ahorrar, más allá del contexto.
Azul Giménez, economista y también artista, fue invitada a Mesa Chica y dejó conceptos clave sobre cómo encarar las finanzas personales en tiempos de incertidumbre. Con un tono fresco y directo, aseguró que el primer paso para cualquier persona es armar un presupuesto y detectar en qué se va realmente el dinero.
“Muchas veces la gente dice que no llega a fin de mes, pero en realidad lo que pasa es que no sabe cuánto gasta. Cuando uno empieza a registrar todo, aparecen esos gastos hormiga que parecen pequeños, pero sumados hacen una gran diferencia”, explicó.
Para Giménez, la clave está en vincular las finanzas con propósitos concretos. “Cuando trabajás solo por la plata, se hace cuesta arriba. Pero si tenés un objetivo claro, como comprar tu casa o ahorrar para un emprendimiento, cada decisión cobra sentido”, destacó.
La economista también habló sobre la necesidad de diferenciar el presupuesto personal del de un negocio o emprendimiento. “Muchos confunden los bolsillos y eso termina generando endeudamiento innecesario. Son dos cuentas distintas y hay que manejarlas como tales”, advirtió.
En su visión, el ahorro no es una cuestión de grandes ingresos, sino de disciplina y hábito. “Cualquiera puede ahorrar. Quizás no sea el 20 o el 30% que recomiendan los manuales, pero aunque sea un 10% ya sirve. Lo importante es generar el hábito, porque si no sabés ahorrar, tampoco vas a saber invertir”, remarcó.
Sobre inversiones, mencionó que más allá de los activos financieros existen recursos accesibles como el oro o incluso pequeños plazos fijos que ayudan a frenar gastos impulsivos. “El secreto está en planificar, anotar todo y entender que cada peso tiene que estar asignado a un propósito”, señaló.
Antes de despedirse, dejó una frase que resume su filosofía: “Las finanzas son orden y disciplina, nada más. No hace falta ser experto para llevar tus cuentas. Con presupuesto, planificación y propósito, cualquiera puede mejorar su economía”.