Internacional
8/02/2023
Sin cambios en las formas de producción, es imposible un mundo sin Salmonella
Tampoco podemos llegar a este objetivo si nos continúan sometiendo a consumir agua contaminada, según el genetista Eduardo Groisman.
El genetista argentino Eduardo Groisman lleva 40 años estudiando bacterias. Más específicamente, la Salmonella; la cual es la principal causa de las gastroenteritis producida por la ingestión de pollo, carne, verduras, frutas y huevos contaminados; como también de la fiebre tifoidea.
En su laboratorio en la Universidad de Yale, en Estados Unidos, busca dilucidar tanto los mecanismos que permiten a las bacterias causar enfermedades como aquellos que ayudan a mejorar la salud humana. Pero en el caso de la Salmonella, no hay beneficios: cada año, 550 millones de personas en el mundo contraen alguna enfermedad transmitida por alimentos y Salmonella es una de las cuatro bacterias principales detrás de ellas.
Como explica Filo News, a fines de enero se conoció la noticia de muertes e internaciones en el partido bonaerense de Berazategui a raíz del consumo de carnes y achuras presuntamente contaminadas con Salmonella, y durante los festejos por el campeonato mundial de fútbol, unos 100 habitantes de Ceres, provincia de Santa Fe, se intoxicaron tras haber comprado en un puesto callejero alimentos infectados con esta bacteria que puede causar diarrea, vómitos y calambres abdominales. Además, en abril de 2022, más de 150 niños de nueve países europeos tuvieron salmonelosis luego de haber comido una partida contaminada de chocolates de una reconocida empresa belga; por lo que este no es un problema solo de nuestro país. Pero ser parte del “tercer mundo” trae sus consecuencias.
Aunque “es imposible que haya un mundo sin Salmonella” sin cambiar las formas de producción ya que las granjas donde se crían los animales de consumo están contaminadas (salmonella typhimurium) y contamina más alimentos -incluso frutas-, “la que causa fiebre tifoidea (salmonella typhi) se elimina básicamente tratando las aguas; es un problema de estándar de vida, de desarrollo, porque este patógeno no tiene reservorio animal. En cambio, con el que causa gastroenteritis , perdimos, a menos que haya un cambio muy grande en la manera de producción”.