9/01/2024

Plot twist: al final la que quiere bajar a Milei es Villarruel

Compartió una nota del Financial Times que habla sobre la “posibilidad cierta de que Milei no termine su mandato de cuatro años” y que ella asuma.

Si hay algo que hay que reconocerle a La Libertad Avanza, es que puso a la Argentina en la tapa de medios internacionales. Aunque no precisamente por las cuestiones que nos gustaría, sino por la curiosidad que generan afuera los perfiles de nuestros gobernantes.

El pasado martes, el Financial Times subió una nota que parece el guión de lo que sería un golpe institucional. Describe explícitamente la “posibilidad cierta de que él (Milei) no termine su mandato de cuatro años” por ser “un excéntrico conocido por sus ataques de ira y peinados locos”.

En esta hipotética situación que se plantea, aparece la figura de Victoria Villarruel como la vicepresidenta, una “figura política más pulida” que ostenta “ser la siguiente en la línea de sucesión” y “estar lista para todo” en caso de que las reformas extremas planteadas hundan a su compañero de fórmula. El escrito también habla de una “desconexión” y “diferencia de valores” entre ambos libertarios, que generarían que Villarruel haga su propio camino buscando consenso en cuestiones menos puntuales que el actual presidente, llegando así a ocupar su lugar cuando este se baje del barco (o lo bajen).

Todo esto podría quedar en meras suposiciones del diario británico. Pero Victoria reposteó el artículo -que también habla de su necesidad de “reescribir la historia argentina” reivindicando la dictadura, pintandolo como algo positivo- en sus redes sociales, junto en el segmento que citan a un diplomático asentado en Buenos Aires que aseguró que “hay que observarla atentamente; ella está lista, para lo que sea”.

Se especula con una “confesión en partes” de cuáles son sus planes. Lo cierto es que es irresponsable por parte de cualquier figura política hablar con naturalidad de una eventual caída del gobierno, cualquiera sea el contexto. Si alguien de la oposición hiciera el mismo análisis, sería repudiado por el oficialismo inmediatamente. Sin dudas. Incluso pronostico la posibilidad de que en los comentarios de esta publicación, como en los de otras publicaciones de otros medios que han levantado esta noticia, aparezcan fanáticos de La Libertad Avanza a acusarme a mí de golpista, kirchnerista, zurda, peronista, delincuente, empobrecedora, pautada y más. Pero la mayoría de esta nota no son mis palabras, son las palabras del Financial Times reposteadas por la vicepresidenta.

Roma Bischoff