Es el caso de Lautaro Alvaredo, un chico de 19 años que recibió una golpiza brutal por una patota. Los culpables aún se encuentran prófugos.
Les pidió bajar la música de la fiesta que realizaron al finalizar la función para que su hija autista pueda dormir y terminó brutalmente golpeado.
El hincha quedó detenido por golpear al personaje del “trencito de la alegría” al impacientarse porque no arrancaba.
Habló la hermana del joven que casi asesinan a golpes en la carpa Yonar hace poco más de un mes atrás.