Judiciales

30/11/2024 09:49

María Cash: ¿Un entramado de poder detrás del silencio de los empleadores del camionero?

La Justicia pone la lupa sobre vínculos políticos y omisiones en el caso que conmociona a Salta desde 2011.

La investigación por la desaparición y presunto homicidio de María Cash, la joven diseñadora porteña vista por última vez en Salta en julio de 2011, ha tomado un giro clave con la detención e imputación del camionero Héctor Romero (71), señalado como el último en verla con vida. Sin embargo, la atención no solo está puesta en él, sino también en su entorno, en especial en su empleador, el empresario Miguel Segura, dueño de la cadena de supermercados “Miguelito” y figura política influyente en la provincia.

Los nexos políticos y el silencio sospechoso

En el momento de la desaparición de María, Daniel Segura era Intendente de General Güemes, actual diputado provincial del PJ, ocupaba un rol político relevante en la región. Otro hijo, Federico Segura, asumió como senador en 2012, consolidando el peso de esta familia en la política local.

El fiscal federal Eduardo Villalba, quien lidera la investigación, ha señalado el “silencio del entorno” de Romero como un obstáculo clave en el avance del caso. Según Villalba, las contradicciones en los testimonios de figuras cercanas al camionero, incluido su empleador, generan dudas sobre posibles encubrimientos o intentos deliberados de desviar la atención.

Entre los investigados por falsos testimonios están Gustavo Lemos, encargado de un supermercado de Segura en Joaquín V. González, y el propio Miguel Segura. Ambos habrían proporcionado versiones inexactas sobre el recorrido que realizó Romero el 8 de julio de 2011, cuando desapareció María.

Pruebas y contradicciones que complican el caso

La imputación contra Romero se basa en registros de antenas telefónicas, declaraciones inconsistentes y una serie de demoras inexplicables en el trayecto entre General Güemes y Joaquín V. González, donde transportaba mercadería en un camión Mercedes Benz. Además, testimonios de su entorno, incluido su hermano, quien sugirió que Romero debía “hacerse cargo” si había cometido un crimen, refuerzan la hipótesis de su responsabilidad.

El fiscal Villalba considera que no solo se debe investigar al sospechoso directo, sino también al entorno empresarial y político que podría estar ocultando información crucial. “Con entorno nos referimos a las personas que sabían de su recorrido y tenían algún tipo de relación laboral o personal con él”, aclaró.

¿Encubrimiento o algo más profundo?

Las sospechas se profundizan al analizar el peso político de la familia Segura y su influencia en el desarrollo inicial de la causa. La falta de cooperación y las contradicciones detectadas levantan interrogantes sobre si hubo interferencias en las primeras etapas de la investigación, permitiendo a Romero eludir responsabilidades durante más de una década.

Mientras la Justicia Federal avanza en las indagatorias, surgen preguntas que todavía no tienen respuesta: ¿Por qué el entorno de Romero y Segura mantiene este silencio? ¿Encubren a un asesino o protegen un entramado de poder que excede el caso de María Cash?

Un caso que busca justicia tras 13 años

La desaparición de María Cash sigue siendo uno de los casos más emblemáticos y conmocionantes de Salta. La reciente imputación de Romero reaviva las esperanzas de justicia para su familia, pero también abre un nuevo capítulo en la investigación, donde el entramado político y empresarial parece ser tan importante como las pruebas materiales.

En el camino hacia la verdad, una cosa está clara: el silencio no será eterno, y las grietas de este entramado de poder comienzan a visibilizarse.

Fuente: Diario InfoSalta

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